domingo, octubre 14, 2012

El Extraño Viaje



Todo es extraño. Mañana me levantaré, me ducharé, pues soy un mameluco muy aseado, me vestiré y partiré hacía la nueva vida. Estoy tan exhausto tras unos días de vorágine en mi querida imprenta que los nervios se resiente en una gama muy baja del espectro de mis neuronas. Es como un ruido de fondo, un run rún, un come come underground, que hace que mis tripas resoplen como Moby Dick, pero mi cabeza está tan adormilada que no doy pie con bola. Pero es extraño, redundo. Me imaginé que saldría de aquí, para un destino con las oposiciones a secundaria aprobadas, y nada más lejos de la realidad. Voy a formarme de nuevo, como un párvulo, beberé de los nuevos saberes sobre colores y papeles, de máquinas quasimágicas y de olor a tinta. Nueva convivencia. Nuevas rutinas. Uff.

Llevo mis medicinas, no se crean, como Jesús Franco es esta simpática escena.
Sinceramente espero que no acabe como la peli del título de este post. Será un extraño viaje, pero no acabará en Mazarrón, sino en Vallecas; reitero mi deseo de no terminar como Tota Alba en dicha película. No espoileo más. Esta miniatura es para decirles que sigo vivo, medio coleando y asustado, pero ilusionado ante esta nueva perspectiva. Y no escribo más, además, porque le debo un artículo a Fernando y hasta que no se lo entregue, convenientemente ilustrado, no estaré del todo tranquilo.

Parto, si. No tendré ordenador en unos días, pero creo que podré sobrevivir. Si no, pulularé por web cafés y locutorios alóctonos de la manera más tonta.

No crean que me he olvidado del post  luchanero y del de mi hospedero especial en Torrejón City, pero es que no ha habido tiempo, debido a esto.

Próximamente pues MÁS. Aquí, en este humilde blog de viajes corticos.

No es ligero el equipaje

2 comentarios:

  1. Así me gusta. Preocupado por tus deberes.

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    1. Me he dedicado a dibujar y a escribir en papel. Le prometo que tendrá todo el material el viernes por la mañana.

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Ponga lo que ponga, Mameluco agradecío